Exhiben la ‘Corona de espinas’ de Jesús
En la Catedral de Notre Dame exhiben la ‘Corona de espinas’ de Jesús, una antigua reliquia que muchos cristianos creen y veneran como la corona de espinas que sufrió el Salvador en su crucifixión.
La corona es una banda circular de ramas encerradas en un tubo dorado de oro que se visualiza durante tres días para conmemorar el 800 aniversario del nacimiento y bautizo del rey Luis IX de Francia, que la adquirió en 1239.
La reliquia fue mencionada por primera vez por los peregrinos de Jerusalén en el siglo quinto y fue trasladada a Constantinopla en el siglo 10.
El artefacto ha aparecido en ceremonias especiales un puñado de veces en los últimos cien años: en 1997, y en 1939, en vísperas de la Segunda Guerra Mundial, para celebrar siete siglos desde que llegó a Francia.
La corona de espinas, que se cree que ha sido usada por Jesucristo y que fue comprada por el rey Luis IX en 1239 se presenta en la Catedral de Notre Dame en París, el viernes 21 marzo, 2014.
Para conmemorar el 800 aniversario del bautizo de Luis IX en la Colegiata de Poissy, la corona de espinas se mostrará fuera de Notre Dame.
La aparición pública es excepcionalmente rara en la Catedral de Notre Dame en París.
A los restos mortales de un santo y a objetos que le pueden haber pertenecido se les llama «reliquias» y siempre las ha venerado históricamente la Iglesia.
Estas infunden devoción y se les atribuyen milagros, se conservan piadosamente durante siglos en unos relicarios más suntuosos cuanto más insignes son las reliquias: estas son obras de orfebrería y hasta edificios construidos especialmente para abrigarlas.
Las reliquias más preciadas de toda la cristiandad son las que supuestamente pertenecieron a Cristo, constituidas por objetos utilizados para su suplicio: los instrumentos de la Pasión. Según la tradición, parte de estos instrumentos siguen existiendo.
Estas se transmitieron, en el transcurso de los siglos, por la devoción de los primeros fieles y en los principales tesoros de las monarquías cristianas y de las iglesias.
En la actualmente existen tres reliquias de Cristo en el Tesoro de Notre-Dame de París: la Corona de espinas, un fragmento de la Cruz del Calvario, uno de los clavos que sirvió para clavar a Cristo en la Cruz.
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