Rehabilitación como adictos al celular y al internet
Adictos al celular y al internet, cristianos y no cristianos se encuentran necesitados de rehabilitación…
Pregúntese a usted mismo: ¿me encuentro sin cesar tratando de controlar mi teléfono o tableta? ¿si cuento las veces que interacciono con son más 50 a 100 veces al día? Después de un período de estar desconectado, ¿estoy desesperado por volver en línea?
Si esto le suena familiar, entonces hay una buena probabilidad de que usted esté mostrando los primeros signos de la adicción al Internet…
Esta semana, ya que Apple anunció su nuevo iPhone 5s y 5c, que puede estar pensando en actualizar nuestro smartphone una vez más. Investigadores de la Universidad de Kentucky, creen que hasta un 38 % de la población de EE.UU. es adicta al internet y este tipo de dispositivos conectados.
Ellos creen que el problema es cada vez peor, mucho peor, y el psiquiatra americano Dr. Keith Ablow argumenta que estamos frente a una epidemia digital. Él cree que la adicción a Internet dará lugar a” la mayor epidemia psiquiátrica de todos los tiempos”, causando una “pérdida de la realidad y el sentido de sí mismo” a medida que la gente comienza a pasar más su vida en el Internet que en el mundo real.
¿Por qué? La reciente explosión de servicios en la nube, y que el hecho que la mensajería, las redes sociales, el contenido y las aplicaciones que hay ahora se puedan usar adecuadamente e integrar para cambiar de un dispositivo digital a otro, significa que muchos de nosotros hemos llegado a un punto de inflexión en el que se trata simplemente que es demasiado tentador como para no estar continuamente en línea.
¡La última investigación del Almanaque TomiAhohen sugiere que el usuario medio de teléfonos inteligentes los chequea al menos 150 veces al día! Eso es una vez cada seis minutos – incluyendo 14 veces para mantenerse al día con Facebook.
Tanya Schevitz es una portavoz de Reboot, una organización que intenta ayudar a la gente para que se desconecte con más frecuencia. Ella dice:
“Es como una carrera de armamentos… todo es una emergencia. Hemos creado una expectativa en la sociedad que las personas responden de inmediato a todo sin demora. No es sano, y es improductivo, y no podemos seguir así.”
El poder de la Internet para atraer a los usuarios es en sí mismo un culto de distracción. Will Self es un escritor y ex adicto a internet, que ahora escribe el primer borrador de todas sus novelas en una vieja máquina de escribir.
El internet se compara con la adicción, con el argumento, cumple los criterios de la adicción, que es el contenido mental obsesivo conectado a la acción compulsiva. La máquina en sí parece un paradigma del estado adictivo. Lo veo como algo que hay que acabar con la forma en que un alcohólico se vuelve sobrio.
Al igual que otras adicciones en exceso, puede ser perjudicial no sólo para la persona en cuestión, sino por las relaciones en torno a ellos también. En 2008, la princesa del pop Madonna se ha marginado a sí misma como una dependiente de internet temprana y adicta al smartphone, revelando que ella y su esposo Guy Ritchie escondieron sus Blackberrys debajo de la almohada por la noche.
Ella le dijo a la revista Elle, “No es nada romántico. Es práctico Estoy seguro de que un montón de parejas tienen sus BlackBerrys en la cama con ellos. Tengo que dormir con mi BlackBerry, y a menudo me despierto en medio de la noche y recuerdo que me he olvidado de algo, así que a saltar y a hacer notas”. Meses más tarde, iba a presentar una demanda de divorcio.
Y no son sólo las celebridades que ven sus matrimonios tensos por la adicción al teléfono inteligente. La madre a tiempo completo de 31 años Julie Marlow dijo al Daily Mail que admitió que con frecuencia desprecia los avances de su esposo para iniciar relaciones sexuales diciendo: “Lo siento, ” estoy ocupada en mi teléfono. ” Y añadió:” en las ocasiones en que no niego el sexo, reviso mi teléfono inmediatamente después.”
¿Qué puede pasar si sigue?
Kevin Kelly, editor fundador de la revista Wired, se preocupa por nosotros y la próxima generación. Sitios web como Twitter, Facebook, LinkedIn e incluso mide la importancia de estar “enchufado” por temor a “estar afuera”.
Este sentimiento de alguna manera, de quedarse atrás es un “gancho silencioso” y se suma a la naturaleza seductora de la Internet, que nos mantiene regresando por más.
Mantenerse conectado siempre – especialmente para los adolescentes y veinteañeros – es vivir con el temor de que podría perder algo. Y concluye: “Esta vida de conexión continua ha llegado a parecer normal, pero eso no es lo mismo que decir que es saludable ni sostenible”.
El peligro es que si no se puede desconectar de la red, entonces no se puede conectar correctamente con los demás y ser felices con las personas y las cosas en el mundo físico.
¿Qué puede hacer si usted es adicto digitalmente?
Lo primero es determinar si usted tiene adicción a Internet:
Según los investigadores de la Universidad de Kentucky, algunos de los síntomas son:
• Preocupación por la Internet y los medios digitales
• Incapacidad para controlar la cantidad de tiempo dedicado al uso de la tecnología digital
• La necesidad de más tiempo o un nuevo juego para lograr un estado de ánimo deseado
• La disminución de la vida social
• Cambios en el estado de ánimo
• Adversidades en el trabajo y consecuencias académicas
También muchos confesos adictos a Internet han compartido lo que han vivido como los síntomas físicos y emocionales del exceso de horas en línea:
• Los ojos cansados o rojo
• Cuello o rigidez en los hombros
• Dolores de cabeza
• Cansancio o falta de sueño de mirar la pantalla demasiado tiempo
• Ansiedad
• Sensación de estar desconectado de las relaciones con el mundo exterior
¿Cómo desintoxicarse?
Para muchos, un 100 % de “desintoxicación digital” es lo que se requiere. Puede tomar una semana de descanso, o tomar el próximo fin de semana libre y desconectar completamente de hacer una desintoxicación. Para los cristianos recomendamos ir a un retiro de fin de semana sin llevar el teléfono y solo con un número de teléfono escrito en el bolsillo para emergencias.
Resolver para desactivar o no utilizar todo lo que es “inteligente” sobre el teléfono, poner las tabletas de distancia y luego construir un gran fin de semana de actividades del mundo real con amigos y familiares o en la iglesia.
Apague Wi – Fi y conexiones de datos y sólo usar el teléfono en su sentido más básico para la realización de llamadas.
Realice alguna actividad deportiva regularmente sin llevar el teléfono o simplemente salga al parque a caminar 1 hora todos los días sin celular y le beneficiará su salud. Salga a visitar a alguien y ponga en silencio el tiempo que dure la visita. etc.
Cómo cualquier adicción necesita fuerza de voluntad y determinación.
¿Qué te parece?