Sanando la Tierra

Pedro y Pablo, el dúo dinámico del cristianismo

13 agosto, 2015 / adm / Iglesia y Ministerio

Pedro y Pablo

Como se muestra en el grabado del siglo IV, Pedro y Pablo, eran considerados el dúo dinámico del cristianismo. Ellos trabajan en tándem para evangelizar el imperio romano.

En Gálatas 2:7-8, Pablo explica que esta asociación cambió el mundo: «Me había sido confiada la tarea de predicar el Evangelio a los incircuncisos, igual que Pedro le había sido confiada a los circuncidados. Dios, que trabajó en Pedro como un apóstol de la circuncisión, trabajó en mí como un apóstol a los Gentiles.»

Marcion de Sinope, el hereje más vilipendiado del siglo II, se había considerado a sí mismo como un seguidor cercano de Pablo y dejó entrever que Pedro había traicionado la confianza depositada en él por Jesús.

Marción rechazó el tiránico Dios judío del Antiguo Testamento como que no tenía nada que ver con el Dios de amor del nuevo testamento. Con este fin, él compiló un canon de escrituras que contenía solamente epístolas de Pablo distintivas y una versión corta de Lucas con la mayoría de las referencias del Antiguo Testamento.

Sus opositores lo acusan de manipular los textos, eliminando todas las características judías que pudo encontrar. Como era de esperar, la versión de Marcion de las epístolas de Pablo no incluye Gálatas 2:7-8, que señala a Pedro y a Pablo teniendo una relación armoniosa y una doctrina compartida. Naturalmente, muchos eruditos señalan a este como uno de los pasajes que Marción recorta por entrar en conflicto con sus enseñanzas.

Pero incluso hoy en día, existe un considerable debate en cuanto a si Marcion realmente borró el texto o si fue insertado más adelante por los escribas ortodoxos con la intención de refutar a Marcion.

Los proponentes de este punto de vista cambian el nombre de Pedro a Pablo en los versículos 7 – 8, cuando generalmente se refiere a él como Cefas. Otros escritos de Pablo también no hacen ninguna referencia a la división de la responsabilidad misionera en los versos disputados.

En I Corintios, él ve el «partido de Cefas» como apenas otra facción que debe lidiar. También se argumenta que Tertuliano, cuyos cinco volúmenes ‘Contra Marcion’ constituye el ataque más detallado sobre el hereje, no habría fracasado si existían los versos disputados en el momento.

El gran erudito del nuevo testamento Adolf von Harnack lo dice mejor: «cómo ventajoso de lo contrario habría sido para que Tertuliano pudiera triunfante aguantar… el reconocimiento de la Petrino apostolado judío por Pablo, con esta frase pudiendo negar la entera posición de Marción.»

Defensores de la autenticidad de los versos señalan que muestra la personalidad apasionada de Pablo a través en cada línea de la epístola. Ninguna fuente antigua duda de Pablo como el autor.

Y la falta aparente de Tertuliano para usar 2:7-8 como munición contra Marción no demuestra completamente que no lo tenía. Como dijo Tertuliano mismo en ‘Contra de Marción’: «deje que Marcion se avergüence de sí mismo: excepto que es superfluo para mí discutir los pasajes que él mismo dejó fuera, ya que mi caso es más fuerte si le muestro el mal por los que él ha conservado.»

listverse.com

 
 

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